Es verdad, no son lo mismo. No es lo mismo arrancar la rosa
que admirarla y cuidar el rosal para que esa flor siga exhibiendo su belleza.
No es lo mismo querer acaparar esa hermosura solo para ti, que nadie más la
vea, la admire, que nadie la toque... A amarla de tal modo que deseas que
permanezca sana el mayor tiempo posible, te preocuparás de que no le falte agua
y solo el hecho de arrancarla de su madre, el rosal, te provoca pena.
Lo primero es querer, lo segundo es amor. Tan parecidos
aparentemente y tan diferentes en su esencia.
Si esto lo traemos al ser humano vemos que las personas,
cuando hablamos de amor nos referimos más al aspecto posesivo que al altruista.
Queremos para nosotros, queremos exclusividad, queremos ser los únicos para el
otro, cuando decimos "te quiero" esperamos otro "te quiero"
y si esto no sucede te molestas o incluso te enfadas acusando a tu pareja de
que no te quiere...
Este mal llamado amor va a entrar en crisis tarde o temprano.
Como mínimo surgirán problemas de celos. Celos que se basan en el miedo a
perder lo que tenemos
Para empezar deberías analizar qué te llevó hasta esa pareja,
o a buscarla o a necesitarla.
Si estás convencido de que necesitas a otra persona para
vivir y ser feliz ya te estás equivocando. Nadie necesita de nadie para ser
feliz, lo de la media naranja deberíamos
dejarlo para las novelas y películas románticas.
Te aseguro que si buscas pareja porque no eres feliz solo,
vas a sufrir mucho. Significa que aún no has llegado al punto de conciencia en
el que reconoces que hay heridas emocionales dentro de ti y por eso prefieres
poner en otra persona la posibilidad y responsabilidad de hallar esa felicidad.
Estos traumas, estas heridas se han formado generalmente en
la niñez. Si piensas, si analizas cómo te han tratado en tu infancia, te darás
cuenta de lo que en realidad estás buscando en la otra persona.
Esto lo trataba el psicoanálisis y lo definía como el complejo de Edipo y de
Electra.
¿Buscas protección?, por qué crees que no eres suficiente
para protegerte a ti mismo
¿Buscas cariño?, por qué crees que no eres capaz de darte a
ti mismo todo el cariño que te mereces.
¿Te han enseñado que el cariño no debe demostrarse?, ¿que el
cariño solo puede conseguirse mediante el miedo?
No busques pareja, no te limites en tus necesidades.
Desarrolla todo el potencial que tienes y cuando seas capaz de darte todo lo
que te mereces, entonces sí, entonces busca esa persona que te acompañe, que te
aporte, que haga que la relación sume. Y es que, como dice Enric Corbera, si
una relación no suma, resta.
Olvídate de querer, no arranques la rosa, cuida el rosal para
que no solo esa rosa que te gusta se mantenga bella sino para que salgan más flores igual de
hermosas que esa que te ha llamado la atención.
Amar es gratificante en sí mismo. No solo se ama a la pareja
sino a todas las personas. No necesitas que te respondan del mismo modo aunque
sí sucederá así porque es inevitable..
Amar no es dejarse manipular, engañar o que hagan contigo lo
que deseen. Amar es saber quererse lo suficiente como para no permitir que
sobrepasen tus límites, tu amor propio, tu espacio.
Amar es saber que lo que das es tan grande que no necesitas
que te lo devuelvan porque ya te aporta una felicidad inmensa.
Este tipo de amor es la base que debe tener una relación
verdadera de pareja.
Aprende a amar, aprende a no querer. Amar no es necesitar
sino desear estar al lado de otra persona por lo que le aporta.
Gracias.
Rocío Testa Álvarez
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